Consecuencias de no remplazar tus dientes caídos

Hace años era normal perder la mayoría de los dientes naturales con el paso del tiempo. Con los avances actuales en odontología ya es posible mantener las piezas originales, fundamentales para la salud en general y la calidad de vida. Con todo, es habitual acabar perdiendo algún diente, y la opción más recomendable es reemplazarlo por un implante. Y no solo para recuperar la estética, sino también la funcionalidad de la cavidad oral

Según el Consejo General de Dentistas, cuando no se reponen los dientes extraídos, se suele producir una migración de los dientes adyacentes hacia el espacio libre (sobre todo, de los situados posteriormente) y un crecimiento o extrusión del antagonista (o de los antagonistas) que mordía contra el extraído.

¿Cómo recuperar los dientes que se han perdido?

Siempre hay que atender al caso particular de cada paciente, pero según el Consejo de Dentistas, los procedimientos que existen para reemplazar los dientes perdidos son los siguientes:

·       Dientes artificiales fijos, que están ubicados sobre el propio implante y no pueden extraerse.

·       Prótesis dentales atornilladas en implantes, que solo pueden retirarse por el dentista si desea controlar o higienizar su estructura.

·       Prótesis dentales removibles, que se unen a los implantes dentales para aportar una mayor retención y estabilidad, pero pueden removerse si el paciente lo desea.

Es esencial que el profesional explique detalladamente al paciente cuáles son las técnicas utilizadas en el tratamiento de implantes dentales y qué cuidados conlleva el postoperatorio.

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